¿Cómo convertir la ausencia en costumbre?. ¿Será como dejar la luz encendida, tanto de noche como de día, hasta que se deja de ser consciente de que está encendida? ¿O será como apagarla y no volverla a encender, ni siquiera de noche, hasta que se aprende a vivir en la oscuridad?.
No hay comentarios:
Publicar un comentario